Esta reforma fiscal sería la decimosegunda en nueve años de Gobierno de Rafael Correa
Luis Freire Adrián/Esmeraldas
Homero Cervantes, durante la posesión del directorio de la CCE (Foto Luis Freire, 2016) |
“Es un ´paquetazo a mano armada´, a este proyecto que plantea el incremento del impuesto al tabaco y las bebidas
alcohólicas y azucaradas, que consumimos la mayoría de ecuatorianos”,
enfatizó.
En este proyecto de Ley, también se incluyen otros
tributos que sorprendieron a los sectores involucrados como un aumento del 15%
para las empresas de telefonía fija y móvil, la reducción del monto exento de
pagar el Impuesto a la Salida de Divisas (5%), que pasa de 11.170 dólares a
1.098 (tres salarios básicos), y el reajuste de las asignaciones a los
gobiernos secciónales en función de la disposición de recursos fiscales.
La carga impositiva de impuestos no resolverá la
recaudación de dinero y más bien ahonda la recesión económica, reducción en
las ventas comerciales y producción, baja de recaudación para el Servicio de
Rentas Internas (SRI) y alejamiento de los inversionistas extranjeros, sostuvo
Cervantes Coronel.
Con relación al uso del dinero electrónico, que es un
medio de pago vigente desde 2014, que exige que los usuarios entreguen su
dinero físico al Banco Central y carguen unidades de valor electrónicas en su
teléfono móvil, el presidente de la Cámara de Comercio de Esmeraldas, considera
que no es una garantía porque el instituto emisor no tiene dinero físico (dólares americanos), para respaldarlo.
“Tengo una Maestría en Derechos Humanos, que es actualmente
una herramienta conceptual y práctica para el análisis de los fenómenos
sociales y, a la vez, para la protección de las personas, lo cual significa que
debemos tener libertad en todo y que debería ser los principales objetivos de
los Estados”, puntualizó Homero Cervantes, quien es también representante de la Federación de Cámaras del Ecuador.
Cervantes insiste que el Gobierno debe reducir la
burocracia, el funcionamiento de Ministerios y Secretarías estatales, construcción
de obras faraonicas, vender bienes improductivos y los medios de
comunicación incautados. Es por ello que convocó a todos los sectores a
expresar su desacuerdo al proyecto de Ley, al igual como se lo hizo con la Ley
de Herencias y Plusvalía, en el 2015. (I).